Consejos para ir a la playa con niños

¿Quién no recuerda las vacaciones de verano en la playa siendo niño? Cómo nos gustaba, cómo disfrutábamos jugando con la arena o bañándonos en el mar. ¿Quién no se quemó alguna vez y pasó los días sintiendo los hombros ardiendo? Ahora que somos nosotros los adultos es nuestro deber que nuestros hijos disfruten igual o mucho más, y conseguirlo de la manera más segura para ellos. Te ofrecemos una serie de consejos para hacer de vuestras vacaciones veraniegas las mejores de vuestra vida.

1. Proteger la piel, crema solar, ¿sí o no?

Los bebés no deben estar expuestos al sol, dada la delicadeza de su piel, deberemos intentar mantenerlos el máximo tiempo posible bajo la sombra. Para ellos no son recomendables las cremas solares, ya que les pueden producir irritación o alguna alergia. La protección adecuada será la ropa (ligera para no achicharrarlos) y un buen sombrero.

Para los niños, utiliza crema protectora por lo menos de factor 50, y procura que sea resistente al agua. Aplícasela al menos media hora antes de ir a la playa, y vuélvela a aplicar cada 2 horas.

No te olvides de aplicarla por toda la piel, incluidas las orejas, el cuello, la nariz y el empeine de los pies. Y fíjate siempre en la fecha de caducidad, ya que su efecto en tal caso será mucho menor.

2. Proteger los ojos

El agua y la arena reflejan la luz del sol, por lo que es importante proteger también los ojos de nuestros pequeños. Utiliza siempre gafas con lentes homologadas y adecuadas para la playa.

3. Hidratación, hidratación, hidratación

Parece un mantra, y no estaría mal que lo fuera. Nunca te olvides de llevarte a la playa más cantidad de agua de la que creas necesitar. Entre el ejercicio, el ambiente salado del mar y el sol, tus niños tendrán bastante sed que siempre ha de ser saciada. Mete al congelador una botella de agua la noche anterior y te asegurarás tener agua fresquita a última hora del día. Si llevas a un bebé, además debes hidratarle con mucha más frecuencia y asegurarte de que tiene una temperatura correcta.

4. Cumple un horario

No conviene pasar todo el día en la playa bajo los rayos ultravioletas. Los niños deben descansar un poco después de comer para no soportar el calor de las horas centrales del día.

Si tienes niños muy pequeños, puede que necesiten dormir un rato. Si no llevaste un moisés a la playa, la mejor idea es hacerle un agujero en la arena, a la sombra, ancho y poco profundo y ponerle una toalla encima.  Tu bebé dormirá muy cómodo en esta nueva cama improvisada.

5. Elije bien la playa

Intenta encontrar una playa que esté adaptada para niños, limpia y con una arena apropiada para que los niños jueguen. Con accesos cómodos a la playa y duchas por si las necesitas. Que disponga de un puesto de vigilancia y emergencias, y, a ser posible, que no tenga muchas olas o viento para que tus hijos estén un poco más seguros en el agua.

6. Mantén a raya a la arena

Es recomendable crear un espacio limpio de arena para los niños, sobre todo para los bebés. Llévate una sábana vieja, y sujétala con la nevera, mochilas, y la sombrilla, intentando que se forme una barrera protectora contra la arena que arrastra el viento. Tendrás un espacio en el que tu bebé podrá arrastrarse sin tragarse tanta arena.

7. Piscina para los más pequeños

Con un bebe menor de un año, jugar en la orilla puede ser peligroso e incluso puede llegar a aburrirse. Lo ideal es conseguirle una piscina donde puedas echar agua y llenarla con sus juguetes favoritos. Si no dispones de una piscina o una barca hinchable, siempre puedes cavar un hoyo cerca de la orilla e intentar que se vaya llenando con las olas.

8. Al marcharte, recoged todos los deshechos

La playa es de todos, y a todos nos gusta encontrárnosla limpia. Y es nuestra responsabilidad mantenerla así y enseñarles a nuestros pequeños el respeto por el medio ambiente. Hazles partícipes de la misma, les encantará, y construirás un futuro más ecofriendly para ellos.

9. Después de la playa

Incluso tomando todas las medidas protectoras que puedas, tus pequeños a veces reciben demasiado sol. Puedes aliviar sus quemaduras dándoles un baño aderezado con unas gotas de vinagre de sidra de manzana. Y después del baño una buena crema hidratante ayudará con su recuperación y les dejará un encantador olor en la piel.

10. Zapatillas para ir a la playa

Lo ideal son unas zapatillas sin cordones, evitaremos que se mantengan ceñidas al pie y se creen rozaduras por la arena. Os recomendamos nuestras zapatillas inglés sin cordones, con una gran variedad de color en lona desgastada, o por seguir la estética marina, su versión con estrellas o con rayas. Y si te encanta tanto como a nosotros la combinación que pueda surgir con las rayas, echa un vistazo a nuestras zapatillas camping con rayas y nuestras slip-on rayas, te enamorarán.